El Grupo de Suelos y Gestión del Agua de la Estación Experimental Agropecuaria Anguil, estaban realizando un monitoreo en cultivos de girasol, y encontraron daños en la oleaginosa, relacionados a problemas en los suelos.
Advierten que estos problemas, se deben a las densificaciones subsuperficiales del suelo, que están limitando el crecimiento de las raíces, y el ingreso y movimiento del agua a través del perfil, condicionando el desarrollo de este cultivo.
“El primer síntoma visible de este problema es la desuniformidad en el cultivo”, detallaron los técnicos, y agregaron: “Es importante hacer un buen diagnóstico para evaluar la condición de los suelos debido a que, ésta desuniformidad podría ser un indicador de la necesidad de elaborar estrategias para la recuperación física del suelo”
En las evaluaciones realizadas observaron que el 10% de las plantas presentan un escaso desarrollo tanto aéreo cómo radicular (E1), el 20% tuvo una mejor condición (E2), un 50% con buen desarrollo (E3) y el 20% de la superficie evaluada presentó una excelente condición aérea y radicular (E4)”.
Las fotos que proporcionó el INTA:
