Publicidad Cerrar X

La Niña no solo impacta en los cultivos: afirman que agudizará la escasez de hacienda

Un informe del Rosgan advierte que es probable que se agudice la escasez de animales a mediano plazo, por destetes más tempranos y mayores descartes de animales ante la menor oferta forrajera.

infocampo
Por Infocampo

En medio de los esfuerzos que viene realizando el Gobierno para mantener estables los precios de la carne vacuna, las continuas olas de calor y la escasez de precipitaciones, en el marco de la presencia del fenómeno La Niña, son una mala noticia.

“La seca que ya azota a vastas zonas productoras del país, sumado a las altas marcas térmicas que se han estado registrando y que nuevamente están en los pronósticos para los próximos días, es la variable que podría terminar de agudizar la actual escasez de hacienda, condicionando a su vez la recuperación de la oferta hacia el mediano y largo plazo”, advierte el mercado ganadero de Rosario (Rosgan) en su informe semanal.

Mirá también Un corte que prohibieron exportar fue el que más subió en noviembre y diciembre

El primer impacto ya se ha sentido, especialmente en el norte del país, donde se están realizando destetes anticipados para aliviar a las vacas en lactancia y, a la vez, se está dando salida a muchos vientres que no tienen posibilidad de subsistencia en un contexto como el actual.

El resultado de estas estrategias sería no solo la obtención de terneros más livianos, sino también una zafra menos concentrada en los meses pico.

“A su vez, ante los elevados precios que registra el ternero, es esperable que el criador tienda a desprenderse de otras categorías de hacienda, reteniendo la invernada, lo que podría llevar a una zafra aún más aplanada de lo que se vio en los últimos años”, añade el Rosgan.

La sequía y la carne

Pero no solo en la invernada se pueden llegar a sentir los impactos. Para el Rosgan, “también es probable ver una mayor salida de novillitos y vaquillonas destinadas a consumo que, hasta el momento, encontraban en la recría pastoril una alternativa más accesible ante el encarecimiento del grano”.

El problema es que es muy probable que la sequía ponga más presión sobre los precios del maíz y la soja y que, a la vez, agote la oferta forrajera disponible para lo que resta del verano, y lo que se programa como reserva para transitar el invierno.

Mirá también Estiman que 2022 podría ser uno de los año más calurosos

De allí que, si bien a nivel zafra de terneros no se espera una situación tan restrictiva como la vista el año pasado -cuando se perdieron más de 650 mil animales-, tampoco se espera una variación significativa en el número de terneros destetados.

Lo que sí podría verse afectada es la condición de esos destetes, lo que redundará en un mayor esfuerzo para sostener los ya bajos pesos de faena que se vienen registrando en relación a otras ganaderías vecinas (226 kilos por animal contra 250 a 260 kilos en países como Uruguay o Brasil).

“En concreto, el 2022 no será el año en el que comencemos a recuperar nivel de oferta. Y hacia el largo plazo, ya pensando en las zafras de terneros de 2023 e incluso de 2024, es donde vemos una importante restricción en el nivel de oferta”, completa el reporte.

Menos reproducción

También hay que considerar en este contexto el posible impacto en los servicios que aún hoy se están dando en muchas zonas ganaderas.

Producto de inviernos que cada vez son más severos y primaveras cada vez más tardías, la condición corporal de las vacas demanda más tiempo en recuperarse y la curva de servicios se tiende a prolongar.

Mirá también “Carbap: El aumento de la carne se debe a las acciones alocadas del Gobierno”

Por eso, “las condiciones de extrema sequía y fuerte estrés térmico que se han estado registrando desde mediados de diciembre muy probablemente terminen entregando menores tasas de preñez y, por ende, un menor destete de terneros en 2023. A su vez, de la severidad de esta seca dependerá también la cantidad de vientres que lleguen al próximo servicio”, añade el Rosgan.

Bajo este panorama, y teniendo en cuenta que lo que está completamente liberado de enviarse al exterior es la carne de “vaca conserva” (categorías D y E), ante la necesidad de liberar los campos, “es muy probable ver una nueva fase de extracción de vientres que, dependiendo de su intensidad, podría condicionar la capacidad de producción del próximo ciclo”, alerta el mercado rosarino.

Temas relacionados: