Las restricciones al ingreso de productos importados y la consecuente caída del nivel de actividad de varios puertos nacionales genera malestar en los trabajadores portuarios. Tal es el caso de Rosario, donde por estas horas la operación es muy baja por una combinación de diferentes reclamos laborales.
Al pedido por medidas y seguridad en la hidrovía por parte de los capitanes de barcos, se suma los reclamos conjuntos que vienen realizando los despachantes y trabajadores de aduana, quienes manifestaron su “marcada preocupación” ante “la baja en los niveles de actividad, con el consecuente impacto en la situación laboral y financiera de los despachantes de aduana, sus empleados y comisionistas”. Esa posición fue compartida por las autoridades de la Asociación de Empleados de Despachantes de Aduana, AEDA y por los representantes de las terminales portuarias y otros actores independientes vinculados directa o indirectamente con la actividad, según informa Clarín.
Estos pedidos ya llegaron a manos del secretario de Comercio, Guillermo Moreno, quien pidió a los despachantes detalles de las mermas, de cara a una nueva reunión a la que los convocó en la oficinas de Diagonal Roca el próximo 1 de junio. También se transmitió su preocupación ante ciertos aspectos operativos de las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI), algunas de las cuales no tienen como ámbito de aplicación a Comercio sino a la AFIP, que conduce Ricardo Echegaray.
De acuerdo con los datos del INDEC, las medidas del Gobierno provocaron una reducción del 14% en las importaciones en abril, pero eso se dio en paralelo a un retroceso del 6% en las exportaciones, quienes generan divisas.
