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Por una deuda millonaria con la AFIP, podrían rematar cientos de chacras en el Alto Valle

Así lo indicó un reconocido medio local, donde la cuestión de fondo es una deuda de más de $1.700 millones. Piden al Senado que prorrogue la Emergencia Económica para el sector y planean un nuevo "frutazo".

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Por Infocampo

Cientos de chacras del Alto Valle de Río Negro y Neuquén, y algunos galpones de empaque, están en riesgo de ser rematados por la AFIP a partir del mes de junio.

Por una deuda de más de $1.700 millones que no se canceló en el marco de la Ley de Emergencia Económica, los chacareros temen por perder sus propiedades.

Indicaron desde Cipolletti que el 31 de mayo próximo, vence la Emergencia Económica para los productores de peras y manzanas y la AFIP estaría en condiciones de salir a cobrar la deuda y rematar tierras. Por esto, la senadora nacional por Neuquén, Lucila Crexell, envió al presidente, Mauricio Macri, el mensaje de que se prorrogue la emergencia por el plazo de un año.

El Congreso sancionó en 2017, la ley que declaró a los productores del Alto Valle en situación de emergencia económica. Esta norma prorrogó los pagos de impuestos y de aportes patronales por parte de los productores y de los galpones de empaque.

Los beneficios de esta ley, que también favoreció a productores de otras provincias como Mendoza, vence a fines de mayo próximo, y los aportes acumulados deberían ser cancelados a partir del primero de junio.

Tanto los integrantes de la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI), como los miembros de la Federación de Productores de Frutas de Río Negro y Neuquén, se reunieron con el fin de plantear la necesidad de sancionar la prórroga.

El 24 de abril se realizará un “frutazo” en la Plaza de Mayo, en la que se pedirá la prórroga sumado a la reducción de las retenciones.

“Hoy nos encontramos nuevamente con una situación de crisis, quizás más acuciante que la anterior agravada por nuevos factores que podrían sintetizarse en la variación del tipo de cambio e incremento de los costos, aumento de tarifas, la caída de los reintegros y la reinstalación de los derechos de exportación. A ello se suma las condiciones de inaccesibilidad al crédito por los costos desorbitantes que agravaron la situación financiera. También, las restricciones a las exportaciones”, concluyó Crexell en el proyecto de Ley elevado al Senado de la Nación.